El oleoducto Caño Limón-Coveñas, de 780 kilómetros de longitud, fue blanco hoy de un nuevo atentado perpetrados por guerrilleros que lo dinamitaron en una zona rural de Norte de Santander.
Según la estatal petrolera Ecopetrol, el ataque se produjo en el sitio conocido como Filo Guamo, en la zona rural de El Aserrío, perteneciente al municipio de Teorama, lo que ocasionó un derrame de crudo que fue a parar a las aguas del río Catatumbo.
Además, se produjo un incendio que afectó una vivienda, en tanto que otras cinco se vieron envueltas en humo, añade el comunicado de Ecopetrol.
Hasta el momento las autoridades no reportan muertos o heridos en una zona en la que hacen presencia las guerrillas del ELN y las Farc.
Ecopetrol, que rechazó el atentado, suspendió el bombeo de petróleo y activó un plan de contingencia para tratar de minimizar los daños ocasionados por la acción guerrillera.
El oleoducto, de 780 kilómetros de longitud, transporta crudo al puerto de Coveñas, en el Caribe colombiano, desde el departamento de Arauca, en la frontera con Venezuela.